sábado, 24 de noviembre de 2007

El Hombre Árbol

No son raíces, sino verrugas en una cantidad inusual. Ese fue el diagnóstico al que llegó el médico Antonio Gaspari, de la Universidad norteamericana de Maryland, luego de estudiar el caso de Dede, un pescador indonesio de 35 años que sufre una extraña enfermedad que le provoca el crecimiento de algo similar a raíces en todo el cuerpo.

Según comentó el diario británico Telegraph, el problema del hombre comenzó cuando de adolescente tuvo un accidente y debieron operarlo en una rodilla. Desde ese momento, y por un motivo desconocido, comenzaron a crecerle esas extrañas raíces que se esparcieron rápidamente por su cuerpo, especialmente en sus manos y sus piernas.

La enfermedad no sólo lo afectó en lo estético, también en su capacidad motriz. Al tiempo, se quedó sin trabajo, su mujer lo abandonó y en el pueblo lo apodaron el “hombre árbol”.
Para poder criar a sus dos hijos se unió al circo, donde la gente paga por ver su extraña fisonomía. Pero Gaspari, especialista en este tipo de enfermedades, concluyó después de realizarle unas pruebas que Dede tenía una enfermedad genética que impedía a su sistema inmunológico combatir a un virus del papiloma humano que “secuestraba la maquinaria de las células de la piel” y les ordenaba producir cantidades masivas de verrugas que le daban ese aspecto parecido a las raíces de un árbol.
Esta es una infección relativamente común que suele causar pequeñas verrugas en las personas que la sufren, lo que ocurre es que este joven indonesio tiene un extraño defecto genético en su sistema inmunológico por el que su cuerpo no desarrolla las defensas ante el virus.
El especialista informó que esa enfermedad se daba en “menos de una persona por millón” y propuso tratar al paciente con dosis sintéticas de vitamina A para frenar la expansión de las verrugas y poco a poco normalizar su aspecto.
“El tratamiento durará de tres a seis meses. No va a quedar perfectamente normal, pero las verrugas se deberían reducir en tamaño y cantidad lo suficiente como para que pueda usar sus manos”, concluyó Gaspari, quien además reveló que nunca había visto algo así en toda su carrera.

Podéis verlo en este vídeo... Realmente increíble, impactante y asombroso

1 comentario:

Anónimo dijo...

Q PEDAZO DE REPELUCOOOO

timaginas q pones las fotos de aduana??jajaj